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"La paz en Ucrania es inevitable, pero Europa quiere guerra", según un corresponsal de guerra

La que vas a leer es una de las mejores entrevistas posibles que puedes encontrar sobre las negociaciones de paz en Ucrania. ¿Qué la hace tan diferente? El entrevistado, por supuesto, quien pasó ocho meses en el Donbás durante el inicio y el transcurso de la guerra después de la intervención de Rusia. Bruno Carvalho, además de corresponsal de CNN en Portugal y colaborador de medios como Telesur, escribió el libro “La Guerra en el Este, ocho meses en el Donbás”, dedicado a su experiencia en el terreno donde cubrió, por ejemplo, la toma de Mariupol o los incesantes bombardeos a civiles en el Donestk.

A Guerra a Leste - 8 Meses no Donbass Bruno Amaral de Carvalho | Continente  Online

En esta videoentrevista vas a encontrar, por ejemplo, su opinión sobre las dificultades para establecer un fuego total en una línea de frente de dos mil kilómetros, el acuerdo de paz más viable que parece imponerse en las negociaciones, y el peligro de que la iniciativa europea de rearme desemboque en un conflicto directo con Rusia. ¿Cuánto duraría Ucrania sin el apoyo estadounidense? ¿Por qué es imposible que Europa pueda sustituirlo? ¿Por qué a Rusia le conviene que las conversaciones se alarguen? ¿Cómo quedaría el mapa después de un acuerdo de paz? ¿Y qué tipo de paz quieren los ciudadanos de las regiones anexionadas por Rusia en el este del país?

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Sin más, los dejó con la entrevista.


Esta semana se anunciaron negociaciones entre Trump y Putin después de una llamada telefónica. Putin, en vez de un alto al fuego total como propuso Zelensky, ofreció un cese al fuego energético en cuanto y pidió una paz duradera sin más envío de ayuda militar a Ucrania. ¿Cuál es tu impresión de estas negociaciones?

Europa no consigue disfrazar, y cuando hablo de Europa me refiero a la Unión Europea y Reino Unido, que este no es su acuerdo y que su objetivo era seguir con la guerra. Cuando escuchamos a los líderes europeos, están enfadados porque Donald Trump los ha sacado de la negociación, diciendo que "nosotros hemos invertido tanto en esta guerra y ahora no podemos dar nuestra palabra". Se nota entre sus palabras y silencios que no es que quisieran otro tipo de negociación de paz, es que no querían la paz en absoluto. Su estrategia era continuar el conflicto para debilitar a la Federación Rusa y desgastar su ejército.

Ahora los dirigentes europeos son los huérfanos de Estados Unidos y son los únicos que quieren seguir la política que siempre ha seguido Estados Unidos en las últimas décadas. Pero esta estrategia no va a prosperar porque, fundamentalmente, Rusia está ganando esta guerra. No es sorprendente, porque Ucrania nunca ha tenido posibilidades reales de ganarla, incluso con todo el apoyo occidental. La única posibilidad que tenía Ucrania de ganar esta guerra sería con la intervención directa de Occidente en el terreno de batalla, y aún así eso provocaría seguramente una guerra mundial con consecuencias devastadoras para todo el planeta.

En este momento hay, como dices, una dialéctica entre Estados Unidos y Rusia, que intentan buscar una solución de paz pero con diferentes objetivos cada uno. Rusia tiene unos objetivos para querer la paz y Estados Unidos tiene otros, claramente no son intereses comunes. Al mismo tiempo, Ucrania, la Unión Europea y Reino Unido intentan buscar un camino que no comprometa su estrategia, sabiendo ya que la paz será una inevitabilidad.

Creo que Rusia, de una forma muy pragmática, quiere retrasar el proceso de paz en el sentido de que todo le va bien en el terreno. Está en una ofensiva, está consiguiendo avanzar despacio en el Donbass pero de forma muy segura, y al mismo tiempo ha conseguido echar a las fuerzas de Ucrania de esa zona sur de Kursk. Si tienes avances vitales, si estás teniendo un ambiente positivo en tu estrategia, naturalmente lo que vas a querer es retrasar la paralización de la guerra.

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Lo que dice Vladimir Putin es que quiere un proceso de paz que concluya definitivamente con la guerra, no un cese al fuego provisorio. Quiere resolver las bases, las raíces de este conflicto. En ese sentido, lo que busca es garantizar la seguridad de Rusia, no permitir que Ucrania entre en la OTAN, y no permitir que se metan tropas europeas en suelo ucraniano, algo que sería un absurdo. ¿Cómo iba Rusia a aceptar que dentro del marco de un proceso de paz fuera a haber tropas de paz de Europa, los mismos que están financiando y enviando armas a Ucrania?

Creo que hubo un avance ayer, que fue el fin de los bombardeos sobre infraestructuras energéticas. Había una petición también de Putin de garantizar la seguridad de los transportes marítimos por el Mar Negro, a eso no se llegó todavía a una conclusión. Pero hoy mismo ya hubo acusaciones de ambas partes, tanto de Rusia como de Ucrania, de haber sido atacadas sus infraestructuras energéticas. Creo que lo veremos por un largo rato, este tipo de acusaciones de violación de esta tregua.

Esta semana hubo un avance, que fue el fin de los bombardeos sobre infraestructuras energéticas. Había una petición también de Putin de garantizar la seguridad de los transportes marítimos por el Mar Negro, a eso no se llegó todavía a una conclusión. Pero de inmediato ya hubo acusaciones de ambas partes, tanto de Rusia como de Ucrania, de haber sido atacadas sus infraestructuras energéticas. Creo que lo veremos por un largo rato, este tipo de acusaciones de violación de esta tregua.

Una de las razones para que Putin dijera que no quería una tregua temporal es que la línea del frente es casi de 2.000 kilómetros y sería muy difícil fiscalizar a todo momento si alguna de las partes viola el acuerdo y quién lo viola en cada momento. ¿Y quién lo fiscalizaría también? ¿Quiénes serían las tropas neutrales que estarían ahí? Los europeos dicen, los franceses y los británicos dicen, "nosotros mandamos tropas como garantía", pero son parte ¿quién podría estar ahí? ¿Una fuerza militar china? ¿Una fuerza militar brasilera? ¿Una fuerza militar de qué país neutral? En ese tamaño de frente, no es una fuerza militar de 10 o 20 o 30 mil hombres. Para cubrir una línea de contacto de 2.000 kilómetros necesitas 100.000 hombres.

En un frente de ese tamaño no sirve una fuerza militar de apenas 10, 20 o 30 mil hombres. Para cubrir efectivamente una línea de contacto de 2.000 kilómetros necesitarías al menos 100.000 efectivos. Y esto plantea varias preguntas fundamentales: primero, ¿qué ejército podría asumir ese papel? Tendría que ser uno que acepte Rusia, por supuesto, y que también acepte Ucrania. ¿De dónde sacas 80 o 100.000 soldados para esta misión? ¿Y quién pagaría el despliegue de semejante ejército?

Están sonando las campanas de la guerra en Europa. De repente escuchamos hablar de que hay que invertir entre 600 mil millones y 800 mil millones de euros para invertir en la maquinaria de la muerte. Escuchamos no solo al gobierno británico, sino a muchos otros diciendo que están dispuestos a enviar sus tropas para garantizar la paz y la seguridad de Ucrania, lo cual no tiene el menor sentido.

Se podría discutir si Brasil, si China, si los países de los BRICS si algún país o varios países pudieran hacerlo con el reconocimiento de las dos partes, porque si no, no es posible. Pero aún así tendría que ser una fuerza multinacional que tuviera la capacidad de cubrir estos 2.000 kilómetros.

Por ejemplo, para hacer una comparación, el sur de Líbano tiene una fuerza multinacional de las Naciones Unidas para garantizar el cese al fuego, que ya no existe en el sur del país. Hay fuerzas de India, de diferentes países, de Italia, de España, y es un país muy pequeño. Aún así hay toda una dificultad en observar todo lo que va pasando en ese territorio.

Yo creo que además de discutir cuántas tropas se envían y cuándo, habría que discutir cómo vamos a terminar esta guerra. Cómo podemos encontrar una solución para una paz duradera. Probablemente no veremos el reconocimiento de esos territorios como parte de la Federación Rusa. Probablemente entraremos en una suerte de guerra congelada como pasa con Corea del Norte y Corea del Sur, donde hay una guerra que no terminó oficialmente pero no hay confrontación.

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Es muy peligroso permitir que la Unión Europea invierta estos 600 u 800 mil millones de euros. Ya no hablo solo por lo que eso va a significar en términos prácticos para la clase trabajadora europea, porque al final esto es dinero que va a salir de los presupuestos de cada estado y naturalmente es dinero que no va a ser invertido en salud, educación, infraestructura de cada país. Significa sobre todo que nos acerca más al conflicto que la Unión Europea nos quiere arrastrar. Con la calidad de dirigentes que tenemos en este momento, muy abierta a colaborar con la extrema derecha, y además con el peligro de gobiernos de extrema derecha en varios países de Europa, creo que entramos en un ciclo muy peligroso.

Uno tiende a pensar, por ejemplo, que el gobierno de Alemania ahora, supuestamente de centro-derecha, que está haciendo todo este gasto militar, le puede dejar una fuerza armada modernizada a un eventual gobierno de ultraderecha en el futuro.

Tanto Alemania como Francia están jugando un papel muy importante también. Emmanuel Macron habla como si no estuviera en una situación precaria, cuando en cualquier momento puede dejar de ser el presidente de Francia. En Alemania la situación es también muy inestable, como en muchos países de Europa, incluso Portugal, que tenemos en este momento un gobierno dimitido y vamos a tener elecciones en mayo.

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Hay como la creencia de que podemos, con gobiernos liberales o socialdemócratas, reconstruir una Europa fuerte con un ejército propio, que pueda independizarse de Estados Unidos. Pero en algún momento podemos estar delante de una situación en que nuestros gobiernos sean de ultraderecha. Hitler no apareció de la nada. Antes de Hitler hubo un trabajo de la socialdemocracia en ese país. Recuerdo que Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht fueron asesinados justamente por los Freikorps, que eran fuerzas conectadas con la socialdemocracia, y muchos de los nazis salieron justamente también de esa fuerza.

Yo creo que Donald Trump y Elon Musk van a invertir mucho en apoyar a la ultraderecha en Europa, con el objetivo de desagregarla, de destruir a la Unión Europea, por la cual yo tengo muy poca simpatía, pero tengo menos simpatía todavía por la ultraderecha. Vivimos realmente un momento histórico muy peligroso, no solo por la pérdida de hegemonía de Estados Unidos en el mundo, sino sobre todo porque creo que Europa, la Unión Europea, es la parte más flaca de todo este juego.

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Si estuviéramos jugando al Risk, la Unión Europea es el jugador con menos condiciones de ganar, porque por un lado tenemos a China y a los BRICS, que se están desarrollando, que están reforzando su capacidad económica y militar, y al mismo tiempo tenemos Estados Unidos, que a pesar de la pérdida de alguna influencia militar, sigue siendo el ejército más potente del planeta y tiene una autonomía que le permite defender su economía. Donald Trump, de cierta forma, es lo que está intentando hacer con una suerte de proteccionismo en su economía.

Pero Europa abdicó de su industria, de una buena parte de su industria, ha impuesto a los países del sur, como Portugal, como el Estado español, como Grecia, el fin de ese proceso de industrialización. Hubo un proceso de destrucción completa de la industria pesada y pasaron a ser países sobre todo de turismo, y ahora estamos incapaces desde el punto de vista económico de hacer frente a los retos del presente. En ese sentido, desde el punto de vista militar no hay mucho que hablar. Nosotros siempre hemos sido vasallos de Estados Unidos, desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Podemos mirar cuántas bases norteamericanas hay en Europa, cuántos soldados están en suelo europeo en este momento. Son decenas de miles.

Toda la discusión que hay con el tema nuclear, por ejemplo, que ahora la propuesta de Francia y de Gran Bretaña es asumir entre comillas el paraguas nuclear europeo, encubre de alguna manera que el paraguas nuclear que hoy tiene Europa es estadounidense. Es decir, cualquier tipo de enfrentamiento que tuviese Alemania, una respuesta nuclear debería ser autorizada por Estados Unidos. No hay nada más vasallo que depender de una potencia extranjera para defenderte.

Dejamos que Estados Unidos durante todas estas décadas se asumiera como, en primer lugar, el policía del mundo y en segundo, nuestro guardaespaldas. Y esto es como los matones: el que viene a tu barrio, a tu casa, a decir, "mira, si quieres yo garantizo tu seguridad. Tú me pagas 100 euros al mes y yo te garantizo la seguridad." Y si tú no le pagas, él va en contra de ti hasta que tú tengas que pagarle algo para garantizar tu seguridad. Creo que es así como funciona Estados Unidos con los diferentes países, sus aliados. Y entonces buena parte de lo que tenemos hoy, incluso de la aviación militar, depende de Estados Unidos.

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Y en ese sentido sale esta propuesta, que me parece muy sin sentido, naturalmente, porque es como tirar más leña al fuego. En el momento en que estamos deberíamos discutir cómo llegar a una situación de desescalamiento de la guerra y seguimos con esta agresión verbal, con esta subida de tono que no contribuye de manera ninguna para llegar a una atmósfera de diálogo entre todas las partes.

Financial Times publicó que Ucrania sólo duraría seis meses en combate sin el apoyo de Estados Unidos. ¿En qué sectores depende tanto que su apoyo no podría ser cubierto por Europa?

En primer lugar, de la inteligencia, que es fundamental. La inteligencia para elegir los blancos, decir lo que pasa a cada momento en el terreno, incluso tener acceso a internet a través de los satélites de Elon Musk. Cuando Elon Musk amenazó con cerrar el acceso a las fuerzas de Ucrania, eso fue una amenaza muy fuerte, porque hoy, como vemos la guerra, depende mucho de la inteligencia, pero depende mucho también de la geografía, de la reubicación.

Cuando tienes que utilizar sistemas de ubicación, sea Google Maps o lo que sea, para encontrar objetivos, esto es crucial. Voy a dar un ejemplo muy práctico: yo hablé con un amigo que era periodista y luego se hizo soldado de Rusia, y que estaba combatiendo en el frente en el Donbass. Él era operador de drones y me contaba que lo que hacen ellos es que primero van con un dron y verifican el territorio, analizan, miran lo que hay, buscan lo que hay y luego intentan detectar cuáles son los blancos. Eso lo utilizan con sistemas de reubicación, o sea tienen que recurrir a internet, tienen que estar conectados para hacerlo. Pero luego traen el dron de vuelta y después, de manera más pragmática, reconocen el camino y vuelven a sacar un dron, pero esta vez sin ningún tipo de conexión, como una forma de intentar escapar a la interferencia de la inteligencia occidental. Por lo tanto, supongo que Ucrania hará lo mismo.

La utilización de drones es fundamental, la utilización de estas herramientas de ubicación. Al mismo tiempo, para utilizar los misiles, necesita también los mismos sistemas. Incluso si no tienen el apoyo de Estados Unidos y si se acaba todo el envío de armas que tienen en este momento, quedarían muy debilitados en su capacidad. Naturalmente Ucrania está produciendo drones, produce algún tipo de misil de más bajo rango, pero su capacidad se vería muy mermada, sobre todo en una guerra donde la artillería juega un papel fundamental.

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Y además, viendo como cada vez hay menos hombres combatiendo por Ucrania, naturalmente todo tipo de operación tiene que ser muy eficaz, sobre todo porque normalmente quien ataca y quien defiende tienen diferentes números de soldados para cada tipo de operativo. Por ejemplo, quien defiende está en una posición más confortable. Por lo tanto, Rusia en este momento, para defender lo que ya conquistó, tiene una gran capacidad que no tiene Ucrania. Entonces, yo veo que muy difícilmente Ucrania tendría condiciones para garantizar ni siquiera una manutención de lo que tiene hoy.

Hemos visto lo que pasó en Kursk, que fue una operación espectacular por parte de Rusia. No es la primera, pero es emblemática en el sentido que utilizaron justamente un gasoducto desactivado por Ucrania, y hay centenares de hombres que se meten en un gasoducto de un metro y medio de alto y durante tres días están ahí esperando la orden de salir y agarrar a los ucranianos por la parte de detrás. Este tipo de operaciones espectaculares se hace con mucho trabajo de preparación.

Por ejemplo, cuando Ucrania hizo la ofensiva a finales de 2022 y consiguió recuperar una buena parte del territorio que Rusia había conseguido controlar, la región de Kharkov, Izium, en fin, eso fue una preparación muy metódica por parte de Estados Unidos. No es solo la inteligencia, no es solo el acceso a medios, a internet o a la tecnología, es también la asesoría militar que recibe Ucrania. No es que el asesor de Estados Unidos que esté en territorio ucraniano le esté aconsejando a Ucrania, le está diciendo cómo hay que hacer. Y ellos lo cumplen. Naturalmente, yo creo que tendría muy poca capacidad de seguir en este registro. Igualmente, yo supongo que podría haber alguna suerte de guerrillas, alguna resistencia de ese tipo, pero no más que eso.

Cuando uno piensa en posibles acuerdos de paz o congelamiento del conflicto, se viene a la cabeza el plan del vicepresidente estadounidense, JD Vance, que hablaba de concesiones territoriales y que Ucrania no entre a la OTAN, incluso con una zona de amortiguación con tropas internacionales. Cuesta ver que esto se pueda implementar por la negativa europea. ¿Qué tipo de acuerdo podría ser aceptable tanto para Rusia como para Occidente?

El control territorial del Donbass, de Zaporozhia, de Jersón, de Crimea, en primer lugar ya es importante porque es un tapón a esa fuerza. Recuerdo que geográficamente Ucrania y Bielorrusia fue siempre por esas partes, por esas zonas que entraron los invasores históricamente. Es un país que prácticamente no tiene montaña, no tiene accidentes geográficos importantes, es casi todo llano, y por lo tanto sería un peligro permitir que esa zona estuviera controlada por Occidente.

En segundo lugar, naturalmente yo creo que no tiene ningún sentido aceptar en un acuerdo que Occidente siga armando a Ucrania. Pero yo no sé qué tipo de acuerdo se puede llegar en esta situación, porque por un lado garantizar que Ucrania no esté en la OTAN, eso me parece que es lo que va a suceder, no hay otra posibilidad. Pero al mismo tiempo, eso ya pasa con muchos países que no son parte de la OTAN, pero al final son armados por la OTAN. Eso pasa en todo el mundo prácticamente. Es como si fueran de la OTAN de forma oficiosa.

Y entonces yo no consigo contestar a esa pregunta, porque realmente no sé cómo Rusia va a lograr garantizar su seguridad, impidiendo a Occidente seguir armando a Ucrania. Lo que sé es que todos los acuerdos que firmó Rusia con países europeos en el marco de esta guerra, que dura desde hace 11 años, desde 2014, fueron violados por Occidente. Los acuerdos de Minsk 1 y 2 no pararon la guerra. Ucrania no cumplió buena parte de lo que estaba acordado, incluso asesinó a uno de los representantes de las mesas negociales, Alexander Zakharchenko, que era presidente de la República Popular de Donetsk.

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Por lo tanto, yo creo que también las autoridades rusas irán de forma muy desconfiada a las negociaciones. Recuerdo que cuando fueron las negociaciones en Bielorrusia y luego en Turquía, en 2022, ya después de la entrada de Rusia en Ucrania, no solo Ucrania asesinó a un miembro de su equipo negocial, acusándolo de ser un agente de inteligencia de Rusia, sino que cuando Rusia decide retirar sus tropas de la región de Kiev y de otras partes de Ucrania, Ucrania decide retirarse de las negociaciones, naturalmente con la indicación de Johnson para seguir la guerra.

War in Europe gives the UK new momentum for a role on the world stage

Y entonces, ¿cómo llegamos aquí? Además llegamos aquí para discutir una propuesta que es muy parecida a la propuesta que estaba siendo discutida en 2022. Lo que es muy grave si pensamos la cantidad de gente que murió desde entonces, entre soldados de las dos partes y civiles. Hay toda una generación que murió, que está herida o que se escapó del país. Ucrania es un país que ya era el país más pobre de Europa, el más corrupto, que tenía los índices más elevados de tráfico humano, de trata de mujeres. Era un país donde muchos de los líderes europeos decían que tenían muchas dudas si Ucrania tenía condiciones para ingresar a la Unión Europea por todos estos datos justamente que estoy diciendo.

Cuando llegamos ahora a una negociación, que prácticamente los puntos son los mismos, la pregunta es esa: ¿Qué ganó Ucrania en mantener una guerra por tres años más? Yo diría que Ucrania no ganó nada, pero el Occidente ganó mucho en el sentido en que debilitó la capacidad, en parte la capacidad militar de Rusia, o la ocupó. Pero al mismo tiempo, si lo miramos desde el punto de vista tecnológico, Rusia hoy está mucho más preparada, desarrolló un nuevo tipo de armas, y tiene algo que es muy importante, que es hombres experimentados en el arte de la guerra. No es lo mismo hacer entrenamientos, tener un ejército muy fuerte, un ejército con muchos soldados, pero que no tiene práctica de la guerra. Y Rusia, desde las intervenciones en el Cáucaso, en Siria y ahora en Ucrania, tiene un ejército muy experimentado.

El ex primer ministro británico Boris Johnson admitió recientemente que en 2019 las fuerzas de extrema derecha de Ucrania impidieron que Zelensky llegara a un acuerdo con Rusia. ¿Es esto una forma de culpar a los ucranianos cuando fue el propio Johnson quien impidió el acuerdo de paz Estambul en el inicio de la guerra?

Es teatro, porque los nazis en Ucrania estuvieron presentes en el plano central de la política desde el principio. No digo desde 2014, antes. Incluso cuando fue la Revolución Naranja y cuando subió Yushchenko a la presidencia, él mismo aprobó como día nacional el día de Stepan Bandera, que fue muy criticado por el Parlamento Europeo porque era indignante tener como un día dedicado a un colaborador de nazis. Pero toda la política en Ucrania ha sido dictada de una forma u otra por ultranacionalistas, ultrafascistas.

En 2014, por esas milicias en Kiev que tumbaron al presidente, y luego se desató y se les dio libertad para hacer marchas por las calles de todo el país y para cometer la masacre de la casa de los sindicatos. Ahora salió la resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que tiene dos dobles significados. El primero, que Ucrania es responsable por no haber hecho nada para evitarlo y para investigarlo, la masacre. Y por otra parte, dice que Rusia utilizó la masacre como forma de propaganda. Como si la masacre no hubiera sido una masacre, porque el tribunal intenta presentarlo como si hubiera sido una lucha entre dos bandos. Yo no conozco ninguna lucha entre dos bandos, donde en un bando mueren 42 y en el otro mueren 4.

De cierta forma ese también es cuando empieza a prenderse fuego en toda Ucrania, porque cuando los ciudadanos que estaban en contra del golpe ven que hay una parte de la ciudadanía, inflamada por el nacionalismo, por el fascismo, va por ellos, ellos deciden que quieren defenderse. Y así es como nacen muchas de las milicias separatistas. Yo entrevisté a una mujer de Odessa, que estaba dentro de la casa de los sindicatos, es una superviviente de la masacre, y que luego de la masacre decidió integrar un grupo armado clandestino que metía bombas en los espacios de la ultraderecha en Odessa. Ella fue luego detenida por un chivatazo, ella es detenida con otros miembros de ese grupo y luego hay un intercambio de prisioneros años más tarde y ella va para Donetsk, donde vivía hasta entonces.

Yo creo que lo que pasó en Odessa ayuda también a explicar un poco esta decisión de una parte de la ciudadanía de Ucrania de que ya no era posible creer en las instituciones y que no era posible vivir culturalmente como rusos en ese país. Entonces, si hacemos una retrospectiva histórica de todo lo que sucedió, vemos que los nazis siempre están presentes en todos los momentos de la política. Acá en Portugal dicen mucho, "no, no es verdad, porque en las últimas elecciones los nazis tuvieron muy pocos votos en el Parlamento de Ucrania." Es cierto. Pero recuerdo que, por ejemplo, el fundador del Partido Nacional Social de Ucrania, que fue uno de los principales líderes de las protestas en la Plaza Maidán en contra del gobierno, él se hizo una figura importante del Parlamento de Ucrania y luego se fue cambiando de partido en partido, que ya tenían nombres muy liberales, pero él sigue siendo un fascista.

Ukraine says 'Battle of Donbas' has begun, Russia pushing in east | Reuters

Recuerdo que Zelensky ha hecho muchas promesas en su campaña electoral, él siendo un nativo de ruso, hablante de ruso, que pidió que había que permitir que todas las lenguas tuvieran su espacio en el país, que la guerra tenía que terminar. De cierta forma, Boris Johnson intenta poner las culpas sobre los nazis. Es cierto, los nazis tienen la culpa, pero ellos son una parte del problema porque los nazis fueron utilizados por Occidente, fueron utilizados por el liderazgo de Ucrania para llegar a sus objetivos.

Pasaste mucho tiempo en el Donbás, conoces la realidad de su gente. ¿Cómo ven ellos estas posibles negociaciones de paz después de diez años de conflicto?

Hay puntos positivos en el sentido que hay ciudades grandes como Donetsk, una ciudad de un millón de habitantes, de las ciudades más grandes de Ucrania con una gran potencia industrial, herencia de la Unión Soviética. Cuando yo fui las primeras veces la gente estaba muy enfadada con la incapacidad de las fuerzas pro-rusas y rusas de alejar a las fuerzas de Ucrania. La línea de contacto era muy cerca de la ciudad, estábamos como a dos, tres kilómetros de la línea del frente.

Es un punto positivo que hay aspectos que pueden parecer pequeños, como el acceso diario a agua, que antes no había - cuando estuve ahí tenía agua una vez a la semana. Y al mismo tiempo los bombardeos frecuentes todos los días, sobre escuelas, hospitales, autobuses, mercados, prácticamente cesaron, aunque todavía hay algunos.

Hay mucha gente diciendo que espera que la guerra termine lo más pronto posible. Imaginar que cuando hablamos de una guerra de 11 años, alguien que tenía 18 años en 2014, ahora tiene casi 30 años. Y su juventud se va sin perspectiva de futuro, sin estabilidad, sin poder tener una familia, un trabajo estable. Por lo tanto, la gente quiere la paz para rehacer su vida. Hay adolescentes que nunca vieron su país sin guerra.

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Pero al mismo tiempo son muy desconfiados, después de los acuerdos de Minsk, después de los intentos de acuerdo en Bielorrusia y luego en Turquía. Creo que la gente prefiere ver que generar una expectativa que luego no se cumpla. Es gente muy fuerte, estamos hablando de una sociedad generada dentro de una cultura muy soviética todavía, que se siente muy rusa.

Cuando yo llegué las primeras veces todavía había gente que me decía que prefería un Donbás independiente que un Donbás dentro de Ucrania o dentro de Rusia. Era una opinión minoritaria, pero esa gente ahora ve que la única solución es estar dentro del marco de Rusia y que es la única forma de que haya un futuro.

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